Es inevitable la sensación que me causas,
pues soy piel de tacto entre tus yemas
que me rozan cada vez que te acercas.
Es inevitable la emoción al pensarte…
Pues quizá soy el suspiro que se escapa desvalido
entre tus labios, que te hace vulnerable a mis latidos.
Inevitable es no mirarte tan dulce y romántico,
con esta sed empalagosa de tu néctar
que se derrite gota a gota sobre la mesa.
No crearse un sentimiento ¡Es inevitable!
Cuándo me lleno de ti con los detalles;
pues soy piel de tacto entre tus yemas
que me rozan cada vez que te acercas.
Es inevitable la emoción al pensarte…
Pues quizá soy el suspiro que se escapa desvalido
entre tus labios, que te hace vulnerable a mis latidos.
Inevitable es no mirarte tan dulce y romántico,
con esta sed empalagosa de tu néctar
que se derrite gota a gota sobre la mesa.
No crearse un sentimiento ¡Es inevitable!
Cuándo me lleno de ti con los detalles;
flores, abrazos, besos y demás casualidades.
¡Es inevitable! Cuándo la felicidad se me desboca
y se me escapa retozando como una chiva loca,
tanto como la incertidumbre de saber…
¿Seré yo quién en tu corazón pernocta?
¡Es inevitable! Cuándo la felicidad se me desboca
y se me escapa retozando como una chiva loca,
tanto como la incertidumbre de saber…
¿Seré yo quién en tu corazón pernocta?
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